El consumo de bebidas alcohólicas aumenta el riesgo de nuevos y recurrentes episodios de Gota. Aunque datos anteriores habían sugerido que la cerveza y los licores fuertes aumentaron el riesgo de crisis gotosa, mientras que el vino no. En un reciente estudio que incluye más de 700 pacientes con gota establecida y al menos un ataque agudo en el año anterior; se encontró una relación significativa dosis-respuesta entre la cantidad de alcohol que se consume desde cualquiera de las tres categorías (cerveza, licores y vino) y el riesgo de exacerbación de la gota recurrente durante los subsiguientes 24 horas. Incluso cantidades moderadas de alcohol se asoció con un mayor riesgo durante este período. Las combinaciones de aumento de la ingesta de purinas alta, el uso de diuréticos y consumo de alcohol, se asociaron con mayor riesgo de brotes de gota.
Am J Med. 2014 Apr;127(4):311-8. Epub 2014 Jan 17